POR FIN AGOSTO 2006





POR FIN

Hoy día 18 de agosto de 2006, después de tres días en Denia , esperando el buen tiempo para cruzar, nos decidimos a hacerlo y sin pensarlo dos veces, dejamos a Ada en la estación ( Conchita esta sola) y a las 11,30h, abandonamos las instalaciones de la Marina Deportiva de Denia Victor, Maria (su mujer) y yo
Hacemos una primera previsión a Es Vedrà con 50 millas a recorrer a 6 nudos de velocidad media y a un rumbo de 89, alcanzando la isla sobre las 20 h.
Cuando alcanzamos los 38º 50,2401N y 0º35,711E vemos resoplar una ballena y al momento, como si nos estuvieran esperando una tortuga herida hace acto de presencia y ante la imposibilidad de nadar y escapar de este grupo de curiosos, permanece impávida ante nuestros ojos, pero la herida de la pata le impide cualquier maniobra de desaparecer y poner a cubierto, le damos un par de vueltas con el barco disfrutando de su presencia y continuamos nuestra marcha
Cambiamos de parecer y decidimos recalar en el puerto de Marina de Botafoch, maniobra a mi parecer arriesgada y peligrosa, ya que cruzar los freuds de noche y entrar en un puerto desconocido no es lo mas agradable para empezar mis vacaciones, pero todo sea por satisfacer a mis amigos.
Sobre las 11 de la noche y no con pocas peripecias atracamos en Marina de Botafoch. Ojo que la Marina, esta señalizada con una luz verde que incita a dejarla por estribor y caso de llevar a cabo dicha maniobra, te comerías el espigón. Repasar el libro de faros y ver que pasa cuando estas dentro del puerto y quieres acceder a otra Marina.
No es mi fuerte “La Noche Ibicenca” pero con taxi nos desplazamos al corazón de Ibiza, no sin antes preguntar como regresar. Por fin en el corazón de una isla donde no cabe un alma mas y prueba de ello eran las continuas escaramuzas de grupos exóticos y propagandísticos que intentaban por todos los medios dirigir la gente hacia sus cuarteles situados en zonas no tan favorecidas por los curiosos como nosotros; en fin que tomamos una copa, nos impregnamos del ambiente para poder luego contarlo en la península y nos fuimos a descansar, la vuelta fue en barco, junto con todos los que comenzaban la fiesta en la discoteca.

Sábado 19 de Agosto:
Desayuno en Botafoch y aunque ahora seria el momento de anotar el teléfono de la Marina, creo que lo voy a obviar por razones de seguridad personal ( me cobraron los muy cabrones 148€ por pasar la noche, mas 0,50€ por defecar, a lo que fui invitado por mi amigo Victor mas 2€ por ducha); al abandonar la marina veo un fondeadero lleno de barcos entrando a estribor, supongo que serán barcos que han sufrido en propias carnes el robo a mano armada.
En fin dejamos Ibiza y relajados y tranquilos comenzamos a disfrutar de esa costa que tanto me atrae y por la que vale la pena cruzar el charco.
Vemos los Islotes Lladró y Santa Eulalia, decidimos parar a bañarnos y comer en la Isla de Tagomago, un baño delicioso que no volveré a nombrar ya que todos son maravillosos.
Levamos ancla en busca de una cala donde pasar la noche, creo que va a ser fácil con la previsión de tiempo que tenemos.
Fondeamos en Port de cales, según mi libro abierta a los vientos del Norte y protegida de todos los demás, también sería mala suerte.
Después de las correspondientes revisiones del fondeo y demás (desconectar la bateria del motor) bajamos a tierra con el chinchorro a estirar las piernas.
Se hace de noche, ya hemos cenado y estoy escribiendo a la luz de 6 velas que no te puedes imaginar la cantidad de luz que hacen.
Nos llama la atención la cantidad de estrellas que hay en el firmamento y que no podemos ver por la contaminación lumínica que hay en las ciudades.
Montamos las correspondientes guardias para revisar el fondeo, a mi me toca a las 04h y a Victor a las 02h. Son las 12 de la noche y el sueño puede conmigo.

Domingo 20 de Agosto:
Sobre las 6 de la mañana se levanta el único viento que no tenia que levantarse y nos vemos obligados a levar ancla y salir hacia otra cala más protegida.
Sinceramente hay que reconocer que he dormido como un tronco, ha sonado el despertador a las 4, he revisado el fondeo y me he vuelto a dormir.
Fuera hay mala mar y creo que nos cogerá de proa, aunque será por un corto espacio de tiempo, ya que el faro Morcarter nos hará cambiar de rumbo y por la aleta de estribor será mas llevardero.
Hay mucha mar y no podemos entrar y recrearnos en las calas, es obligado continuar hacia Cala Salada, a la que llegamos sobre las 10,30h después de una paliza de olas y movimiento del barco; como siempre que paso las Islas Ses Margalides son un regalo para la vista.
Como siempre que llegas a una cala, fondeo, revisión, ver posibles roladas y a bañarte. He visto un muerto y me voy a enganchar por seguridad.
No hay palabras para describir esta cala cuando se hace de noche y los turistas la abandonan.
Nos ponemos guapos, no sin antes ducharnos, advirtiendo al personal que no estamos conectados con la compañía de aguas, ojo al grifo.
Salimos a cenar al xiringito, todo muy bueno, esto si que es la verdadera noche ibicenca aunque la gente se empeñe en lo contrario, aunque creo que quien lo niega es por que no la conoce, es cierto que no esta al alcance de todos.
Pasamos otra noche fondeados sin la correspondiente luz de fondeo, que mas tarde averigüé que se había soltado la bombilla del portalámparas y con un simple giro volvió a funcionar (previa subida al mástil que es lo que acojona).

Lunes 21 de Agosto :
Dejamos Cala Salada a media mañana, después de un desayuno y un par de baños, nos dirigimos a San Antonio a poner gas-oil.
Cruzamos entre La isla del Esparto y Conejera con muy poco fondo y con la mar de popa que nos empuja bastante rápido. Vamos parando en varias calas para bañarnos y poco a poco nos vamos acercando a Es vedrà por la tarde con la intención de cruzar de noche.
La previsión es de levante fuerza 4.
A las 7 de la tarde dejamos Es Vedrà con rumbo 243º y a las 8 de la mañana del día siguiente nos encontrábamos amarrados al pantalón 341 del RCRA.
Hay que destacar la buena travesía que hemos hecho, aunque el alternador dejó de trabajar (luego supe no fue nada serio, simplemente las escobillas) y a la altura de Villajoyosa he tenido que desconectar todo para mantener las luces de posición encendidas. Ojo con los barcos de pesca que salen a faenar desde Villajoyosa.

En fin otra vuelta a Ibiza, aunque hay que reconocer que mucho mas cómodo con el nuevo barco. Creo que he hecho una buena compra y creo que tiene muchas posibilidades de viajar mas tiempo y mas lejos que con el Santy.
Antes de terminar quiero rendir un homenaje al Santy que esta vez no pudo venir y que siempre lo recordaré como el barco que me enseño el camino y me dio la experiencia necesaria para abordar estas singladuras.
Es la primera vez que cruzo sin ti y cuando el mar se cabrea todavía no tengo confianza con el nuevo y a veces lo paso mal. Espero que el inglés ese te trate bien, algún día iré a verte; hasta pronto campeón.